HISTORIA DEL FUTSAL
Los precedentes del
FUTSAL hay que situarlos en Uruguay.
En el año 1930 la fiebre futbolera corría por
las calles de Montevideo, producto de la euforia de los títulos obtenidos por
la Selección Charrúa, en los Juegos Olímpicos de 1928 y en el Mundial de Fútbol
de 1930.
Gracias a la inquietud del profesor de origen
Argentino Juan Carlos CERIANI, quien quería ocupar a sus alumnos de la
Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ) durante las frías tardes de invierno en
actividades como el Basquetbol y el Voleibol bajo techo, sin éxito.
Decide entonces implementar un juego adaptado
por él mismo a canchas pequeñas y lograr mantener motivados a sus alumnos.
La experiencia vivida en su formación
académica junto a los inventores del Basquetbol y el Voleibol, lo impulsan a imaginar y redactar un precario
reglamento de juego con 11 artículos, que en su esencia aún se mantiene vigente
como Fútbol de Salón o Futsal.
Toma del Basketball los cinco jugadores en
cancha, las dimensiones de la misma, y el posicionamiento estratégico por cada
puesto.
Del Hándbol recogió el impedimento de disparar
a portería desde dentro del área penal.
En cuanto al balón, diseña un modelo que
rebota poco con el objetivo de evitar el excesivo contacto físico entre los participantes.
Posteriormente surgirían otras características
muy particulares, como las restricciones en el accionar de los arqueros,
basadas en el Waterpolo, y las rotaciones en conjunto como en el Hockey sobre
Patines.
Así el Fútbol de Salón se propago rápidamente
hacia las numerosas sedes que la ACJ posee en el mundo.
En Brasil no demoraron en perfeccionarlo, y en
ese ideal laboratorio se fue enriqueciendo, lo que permitió su difusión masiva
a nivel internacional.
En el año 1965 se juega el primer Campeonato Sudamericano con la participación
de Brasil, Uruguay, Argentina, Chile y Paraguay, donde la sensación del torneo
fue el conjunto Guaraní, marcando el inicio de la Confederación Sudamericana de
Futsal.
En 1971 se crea la Federación Internacional de
Fútbol de Salón con los países integrantes de la Confederación Sudamericana, lo
que provoca su desarrollo en España y posteriormente en toda Europa.
En Argentina el Futsal ha surgido
paradójicamente desde el norte debido a la influencia Paraguaya y Brasileña,
sobretodo en las provincias de Misiones, Corrientes, Formosa y Santa Fe. De
allí ha bajado a través del Paraná para hacerse sentir en Buenos Aires, y
comienza un espectacular crecimiento en el Sur patagónico ayudado por las
condiciones climáticas, con la preponderancia del gimnasio cubierto.
También hubo un tiempo de practica inorgánica
que precedió a la formación de la Confederación Argentina de Futsal, hecho
histórico ocurrido en la provincia de Corrientes el 14 de agosto de 1964,
contagiando a los clubes River, Boca, Ferro, Atlanta y Hebraica que fundan la
Asociación Metropolitana de Futsal en el año 1976.
LOS AÑOS
OCHENTA: DESARROLLO, CRECIMIENTO Y DIVISIÓN INTERNACIONAL.
Llegamos a la década donde el Futsal comienza
un vertiginoso crecimiento. En 1982 ocurren dos hechos históricos: Brasil
organiza el primer Campeonato Mundial de Futsal y se funda la Federación
Española de FutbolSala después de casi 10 años de practicarse inorgánicamente,
y donde existen más Atletas Federados en Futsal que en ningún otro deporte. Una
muestra más de la singularidad de esta disciplina.
Así la Federación
Internacional de Fútbol de Salón se nutre de países de todos los continentes.
En 1985 la FIFUSA
organiza el segundo Campeonato Mundial de Futsal en España.
Se lo denominó el Mundial Fantasma, ya que las inescrupulosas presiones
que tuvo que sufrir la organización por parte de la FIFA, si bien no pudieron
impedir que la competencia sea un éxito ya que en la final jugada en el Palacio
de Deportes de Madrid había casi 8000 espectadores, se genera un sabotaje qquince
días antes del principio de la competición; a raíz de presiones de la FIFA,
la FIFUSA se entera de que no va a tener subvenciones que le han sido
prometidas
por el Gobierno español y su Ministerio de Deportes.
En
efecto, este desafortunado incidente debe atribuirse directamente a la presión
ejercida por la FIFA (Presidente João HAVELANGE) que
interviene directamente ante el COI (Presidente Juan Antonio SAMARANCH), amenazando con boicotear mediante su veto, la candidatura de la
Ciudad de Barcelona a realizar los Juegos Olímpicos de 1992.
Esta
operación de desestabilización hundirá efectivamente a FIFUSA en dificultades
financieras por lo que debe, contra toda previsión, hacer frente a la totalidad
de la financiación de la organización de su II Campeonato del Mundo, sin
la ayuda que le había sido prometida por el Gobierno español.
Brasil
adquiere en este mundial su segunda corona ante España con un resultado de 3
goles a 1.
Sin
embargo y a pesar de esta delicada situación financiera, la tercera edición del
Campeonato del Mundo de Futsal de la FIFUSA se organizó en Australia en 1988 en
Melbourne, pero Brasil perdió su corona ante Paraguay que gano la final (2-1),
poniendo fin al reinado de Brasil en
este
deporte a nivel internacional.
Viendo
que no llegaba a desarrollar internacionalmente su “Fútbol Cinco”, la FIFA
propuso a los miembros de la FIFUSA, crear a una Comisión Mixta,
encargada de estudiar la aproximación entre las dos disciplinas. Después
de cuatro reuniones organizadas durante los años 1988 y 1989, en Zúrich
en la sede de la FIFA, en las cuales tomaron parte los dirigentes de FIFUSA,
y la Comisión de estudio de la FIFA suministró sus conclusiones
proponiendo la disolución de FIFUSA y la transferencia de la
gobernanza del futsal a nivel mundial bajo la autoridad de la FIFA.
El 23 de
noviembre de 1989, las 19 Federaciones Nacionales de futsal afiliadas a FIFUSA
se reúnen en São Paulo, con el orden del día, el voto a la propuesta por la
Comisión de estudios. Después de un voto democrático, 12 países se pronuncian
contra esta propuesta, 5 países votan a favor y 2 se abstienen.
La
Confederacão Brasileira de Futebol de Salão (CBFS), y también la
federación de
los
EE.UU y del Canadá votan para integrarse en la FIFA. Por mayoría de
votos, la FIFUSA decide suspender y rechazar el proceso de transferencia
de la gobernación del futsal hacia la FIFA.
Seis
meses más tarde, el 2 de mayo de 1990, la CBFS (Brasil) deja FIFUSA,
siguiendo así la
voluntad
de la mayoría de los responsables de sus 27 federaciones regionales brasileñas.
Se
adjuntan a ella las Federaciones de los EE.UU y del Canadá, que pasan bajo la
tutela de la FIFA y que trabajará a la fusión del Fútbol Cinco (FIFA) y
futsal (FIFUSA), para crear más tarde, el clon alterado del futsal, el Futsal
FIFA, cuyas reglas del juego se publicarán por el Internacional Board Fútbol
Asociación (IFAB) en el año 2000.
Las
promesas financieras y de puestos de poder en la FIFA a algunos miembros
de la FIFUSA
durante
la reunión de Zúrich, las presiones financieras constantes ejercidas sobre la FIFUSA,
la
intensa
actividad diplomática del Presidente brasileño de la FIFA con las
autoridades brasileñas y la estrepitosa derrota de Brasil contra Paraguay, tuvieron
por consecuencia la división de los miembros de la FIFUSA y la
integración de varias federaciones de futsal, y la Confederación Brasileña
de Futebol de Salão (CBFS) en la Comisión de futsal FIFA.
SITUACIÓN
ACTUAL:
En el
año 2000 se firma el acuerdo de Guatemala, entre las autoridades de la FIFA y
la Federación Panamericana de Futsal (PANAFUTSAL), quien mantenía la herencia
extinta de la FIFUSA.
En el
famoso acuerdo la FIFA reconoce la independencia de las Federaciones afiliadas
a la ex FIFUSA, e insta a las distintas Asociaciones Nacionales de Fútbol
afiliadas a su organización, a delegar la organización de todas las
competencias de Futsal bajo la tutela de la PANAFUTSAL.
Una vez
más los acuerdos fueron avasallados por la FIFA una vez que era tiempo de
llevarlos a la práctica.
Como
consecuencia se fundó la Asociación Mundial de Futsal (AMF), que hoy rige todas
las competencias oficiales de Futsal en el mundo, y mantiene el legado original
de aquellos países integrantes de la ex FIFUSA, consiguiendo anexar aún más
países de diversos continentes, su actual Presidente es el Paraguayo Rolando
ALARCÓN RÍOS.
Se puede
pues afirmar, viendo los hechos históricos no cuestionables, que desde 1930
hasta 1990, la extensión internacional del Futebol de Salão o Fútbol de Salón (Futsal) fue
la obra única y exclusiva de las organizaciones
regionales y nacionales constituidas para desarrollar el Futsal en numerosos
países, que se
federaron en la FIFUSA en 1971, y que prosiguieron en la misma, con la
difusión internacional
del Futsal, sobre los cinco continentes.
Es por
otra parte de notoriedad pública que la FIFA y sus miembros afiliados no
participaron,
ayudaron
o favorecieron en el desarrollo y difusión del Futsal de manera alguna hasta
1990, sino todo lo contrario, esta organización y sus socios comerciales buscaron
oponerse, a menudo de manera malévola, al éxito y desarrollo de esta nueva
cultura deportiva floreciente, de origen sudamericano.
En Argentina esta división se asemeja al
aspecto mundial. En Buenos Aires capital del país, la competencia de AFA cobija
a los grandes clubes del Fútbol convencional, sin mirar lo que acontece en el
Futsal del interior de su país, excepto cuando se trata de absorber el recurso
humano genuino.
Los medios
periodísticos nacionales solo cubren la información que depende del fútbol y
AFA, para los medios masivos el Futsal Argentino no existe.
Mientras tanto en 14 provincias del interior hace
mas de 35 años que se juegan los campeonatos Nacionales de Selecciones y
Clubes, y el posterior derecho a participar en las instancias internacionales,
con las mismas problemáticas organizativas de hace 30 años, pero con la
seguridad de saber su identidad y sus orígenes; en consecuencia el futuro de nuestro deporte está asegurado.